Nadie me escucha, nadie me quiere, nadie me mira, nadie me presta atención, por eso tome una decisión…….
Ahí estaba yo, cuando por primera vez lo vi, sin importar lo ridículo que se viera hizo feliz a una niña.
Sin darme cuenta he estado por 5 minutos mirando tal majestuosa naturaleza, que se ha percatado de mi existencia.
Al mirar como las puertas de su boca abren y cierran, me di cuenta que entraba a un mundo que no conocía, un mundo donde solo existe un yo y un él, observando mi fatal decisión.
Sus ojos, que brillan dentro de mí, su boca, me llena de pasión, sus manos, que me toman y me llevan al paraíso, sus piernas que me afirman al caer al precipicio, me di cuenta de que todas sus facultades se han apoderado de mi.
¡Qué felicidad! Que baje Dios y lo vea y aunque no se lo crea esto es el triunfo del amor. Que maravilloso, que hermoso, que pasión más satisfactoria. El me ama.
Lo he comprobado, me ha salvado sin la necesidad de saber lo que iba a hacer. Con su mirada expreso que al tirarme yo, vendría junto a mí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario